Jazmín de las Azores

Jasminum azoricum

Raquel Patro

Actualizado el

El Jazmín de las Azores (Jasminum azoricum) es una planta arbustiva de crecimiento erecto a trepador, con una textura semi-lignificada y un alto valor ornamental. Es originario de la Isla de Madeira, donde se encuentra seriamente amenazado, limitándose a un número de menos de 50 individuos. Produce largas ramas delgadas y ramificadas, formando un enredo bastante denso. Sus hojas son opuestas, perennes, coriáceas, trifoliadas, glabras y brillantes, compuestas por folíolos ovados a ovado-lanceolados.

Su período de floración es bastante extenso, comenzando en primavera y perdurando casi todo el año en lugares de clima cálido. Las inflorescencias en racimos terminales reúnen flores estrelladas de un blanco puro y deliciosamente perfumadas, con notas ligeramente distintas de otros jazmines, que algunos afirman que recuerdan el aroma de la gardenia. Las flores de este jazmín son muy atractivas para mariposas y otros insectos polinizadores. Los frutos formados son bayas oscuras y pequeñas, de poca importancia ornamental.

En paisajismo, el Jazmín de las Azores es muy valorado, aunque es difícil de encontrar para la venta. Se utiliza principalmente como trepadora, cubriendo pérgolas, glorietas, cercas, columnas y coronando muros. Su textura fina y delicada, junto con su floración perfumada y blanca, lo convierten en un comodín en varios estilos y tamaños de jardín, como inglés, francés, italiano e incluso tropical. Además, presenta un crecimiento moderado y requiere muy poca mantenimiento, limitándose a la conducción con amarres durante la implantación y podas para controlar la forma. También puede cultivarse en macetas.

Debe cultivarse a pleno sol o en semisombra, en un suelo bien drenado, enriquecido con materia orgánica e irrigado regularmente durante el primer año después de la plantación. Una vez establecido, se vuelve tolerante a períodos de sequía. También es resistente a las heladas, al frío, al viento y a la salinidad de las áreas costeras, pudiendo ser cultivado en una amplia variedad de climas, incluso en regiones más continentales.

Se multiplica por esquejes de ramas semi-lignificadas a finales de primavera y durante todo el verano, colocados para enraizar en un sustrato arenoso y mantenido húmedo. También puede propagarse por acodo aéreo. La floración es tenue en el primer y segundo año, pero gradualmente se vuelve más abundante. Fertilice con abonos no muy ricos en nitrógeno para un desarrollo saludable, baja susceptibilidad a plagas y floraciones intensas.

Acerca de Raquel Patro

Raquel Patro es paisajista y fundadora de Planterista.com. Desde 2006 desarrolla contenidos especializados en plantas y jardines, ya que cree que todo el mundo, ya sean aficionados o profesionales, debería tener acceso a contenidos de calidad. Como geek, le gustan los libros, la ciencia ficción y la tecnología.