El helecho gigante brasileño (Neoblechnum brasiliense) es una especie de helecho subarbustivo nativo de Brasil, que destaca en el paisajismo por su belleza única, tamaño grande y adaptabilidad, siendo una elección interesante para jardines tropicales e interiores. El helecho gigante brasileño es una planta rizomatosa, perenne, de gran valor ornamental y con follaje arqueado muy característico. Se forma en esta planta una especie de tronco corto, escamoso y fibroso con crecimiento lento, que se desarrolla a lo largo de varios años.
Sus hojas son verde-claras, arqueadas, largas, pinnadas, ligeramente onduladas y dispuestas en roseta, lo que confiere a la planta una apariencia voluminosa y textura gruesa. En la cultivar ‘Volcano‘, las hojas jóvenes surgen en el centro de la planta con color rojizo a cobrizo, característica que la popularizó, ya que el rojizo de las hojas jóvenes recuerda a la lava que emerge del centro del volcán. También existen las cultivares ‘Crispum‘, que presenta hojas crespas, y la cultivar ‘Cristatum‘, con hojas crestadas, que aportan una textura más rica y compleja, enriqueciendo aún más la estética del ambiente donde se encuentran. Estas cultivares son especialmente apreciadas por aquellos que buscan añadir un matiz adicional de belleza a su jardín o espacio verde.
En el reverso de las hojas maduras, los soros se forman en líneas curiosamente lineales. Estos grupos marrones y pulverulentos contienen los esporos, fundamentales para la reproducción de la planta. La germinación de estos esporos en condiciones ideales de humedad lleva al desarrollo del prótalo, una etapa delicada del ciclo de vida del helecho, que posteriormente producirá gametos para la fecundación y crecimiento de una nueva planta.
Esta es un helecho que agregará tropicalidad en cualquier ambiente. En paisajismo puede ser conducido bajo la copa de los árboles formando bellos macizos. El helecho gigante brasileño también puede ser cultivado en parterres, borduras sombreadas y en jardines tropicales de media sombra o jardines de invierno, pudiendo combinarse con filodendros y heliconias, por ejemplo.
En interiores va muy bien en macetas, adornando salas, oficinas, halls de entrada, entre otros ambientes, trayendo confort y sofisticación. En general, es una especie de mantenimiento simple. Solo es necesaria la poda de limpieza de las hojas amarillentas o muertas. Evite utilizarla en ambientes con aire acondicionado que resecan sus hojas.
Debe ser cultivado bajo media sombra o luz filtrada y aprecia suelos ligeramente ácidos, ricos en materia orgánica y drenables. El cultivo bajo sol pleno puede quemar su bella follaje, dejándola con aspecto quemado y nada agradable, y puede incluso llevar a la planta a la muerte. Aprecia la humedad relativa del aire elevada, con más del 60% de saturación. Si su ambiente es naturalmente seco, utilice un humidificador de ambiente cerca de la planta, o cree un microclima con otras plantas que transpiren mucho.
Lo ideal es mantenerlas en temperaturas entre 16 y 24ºC, con ventilación suave, sin corrientes de aire. Riegue la planta cuando el sustrato esté superficialmente seco, manteniéndolo siempre húmedo. Fertilice el helecho gigante brasileño en primavera-verano, preferiblemente con fertilizantes orgánicos, o en formulaciones NPK 10.10.10 con liberación lenta, propias para follaje, siempre respetando las recomendaciones del fabricante. Es aconsejable aplicar el fertilizante alrededor de la planta, jamás junto al tallo. La multiplicación a través de esporos durante el verano es una técnica efectiva para propagar esta magnífica especie de helecho. Siembre los esporos en cajas de vegetación mantenidas húmedas.