La Estrella de Belén (Ornithogalum saundersiae) es una planta bulbosa, herbácea y florífera, originalmente encontrada en claros rocosos en los países de Sudáfrica, Suazilandia, Provincia de Natal y Mpumalanga, en el subtrópico del continente africano. Se destaca por sus cualidades ornamentales, tanto en jardines como en arreglos florales, donde se utiliza como flor de corte. Del bulbo subterráneo, emerge un follaje erecto en roseta, con hojas anchas, lineales, de unos 60 centímetros de altura, suaves y de color verde oscuro y brillante.
Florece en verano, desarrollando largos tallos florales, con más del doble de la altura del follaje (hasta 1,5 metros), destacando una inflorescencia tipo umbela, de forma entre globosa y plana. Las flores son numerosas, blancas, delicadas, con forma estrellada y un ovario negro o verde, que resalta por el contraste. Se abren desde los bordes hacia el centro de la inflorescencia, gradualmente, y son atractivas para abejas y mariposas.
Una planta bulbosa para un efecto sorprendente en los parterres del jardín. Por ser aún inusual, la Estrella de Belén aporta un cierto exotismo, al mismo tiempo que confiere un aire elegante y campestre, propio de las bulbosas de flores pequeñas. Plántela en parterres bien fertilizados y no propensos a encharcamientos, en número de 20 o más para un efecto más interesante.
Los bulbos de la Estrella de Belén también pueden plantarse en macetas y jardineras y mezclarse con otras especies. En otoño, inicia su período de dormancia, y las hojas se marchitan y caen, para luego reiniciar el ciclo vegetativo en primavera. Los bulbos pueden dejarse en el suelo, o ser removidos, limpiados y guardados para el replantío. Las inflorescencias presentan gran durabilidad, y pueden componer hermosos arreglos florales y ramos.
Debe cultivarse bajo media sombra, recibiendo preferentemente el sol de la mañana, en suelo fértil, bien drenado, enriquecido con materia orgánica e irrigado regularmente, sin excesos. Reduzca los riegos gradualmente en otoño, favoreciendo el período de dormancia de la planta. En invierno, suspenda los riegos o riegue mínimamente, evitando la deshidratación del bulbo.
Fertilice en la plantación con abonos de liberación lenta y suplemente durante el crecimiento y floración con fertilizantes líquidos. Plante los bulbos a una profundidad de 3 a 5 centímetros y espaciados unos 15 cm para un mejor desarrollo. Con el tiempo, la Estrella de Belén forma densos grupos por la propagación de los bulbos, por lo que es interesante realizar una reforma en los parterres y replantar, separando las plantas cada 3 o 4 años. Se multiplica por división de los bulbillos formados alrededor de la planta madre y por semillas.