La Cola de Ratón (Peperomia caperata) es una planta herbácea con follaje denso, redondeado y bastante atractivo, cultivada en todo el mundo como planta ornamental, siendo aprovechada principalmente en la decoración de interiores. Sus hojas son cordiformes, carnosas, de color verde oscuro en la forma típica y con venas profundas en bajo relieve, que le dan un aspecto «engomado» a la hoja. Están sostenidas por largos pecíolos de color rojo o rosado. Las flores son diminutas, blancas, y aparecen en diferentes épocas del año, dispuestas a lo largo de inflorescencias en forma de espiga que surgen sobre el follaje.
Las inflorescencias son delgadas, cilíndricas y largas, a menudo curvadas, asemejándose a una cola de ratón, lo que le ha valido el nombre popular de «rabo de rata». Hay diferentes cultivares de esta Cola de Ratón. La gran mayoría de ellos se centra en alguna característica de las hojas, como tonos rojos, verdes oscuros, plateados, hojas más grandes o más pequeñas, más anchas o más estrechas, etc. Entre ellos se encuentran ‘Emerald Ripple’, ‘Metallic Ripple’, ‘Pink Lady’, ‘Rosso’, ‘Schumi Red’, ‘Red Sunshine’, ‘Variegata’, ‘White Lady’, etc.
Esta especie es ideal para terrarios abiertos o cerrados, así como para macetas amplias y poco profundas, decorando balcones, mesas, escritorios y estanterías. Se desarrolla bien en lugares con poca luminosidad, donde otras especies de plantas perecerían. En lugares con clima tropical, también se puede utilizar como cobertura en el jardín, en áreas sombreadas o con luz filtrada por la copa de los árboles. De esta manera, puede ser utilizada como un excelente fondo para composiciones con otras plantas, incluyendo otras especies de peperomias.
La Cola de Ratón debe cultivarse en lugares con luz filtrada o difusa, sin la incidencia directa del sol. El sustrato debe ser rico en materia orgánica, pero perfectamente drenable, e irrigado de manera que se seque ligeramente entre riegos y sin encharcamientos. En invierno, reduzca los riegos para evitar la descomposición de las raíces. A pesar de su aspecto delicado, la Cola de Ratón es bastante resistente, adaptándose a lugares con poca luminosidad y no es muy exigente en cuanto a la humedad ambiental y las pulverizaciones en las hojas.
Hojas pálidas pueden ser señal de exceso de luz, así que muévala a un lugar más protegido. Temen el frío intenso. Por lo tanto, en lugares con clima templado, cultívela en interiores o invernaderos. Conviene replantar la Cola de Ratón anualmente, colocándola en una maceta más grande o dividiendo la planta. De esta manera, se renueva el sustrato y la vitalidad de la planta. Fertilice quincenalmente en primavera y verano, con fertilizantes específicos para follaje diluidos a la mitad. Se multiplica por esquejes de las hojas y división de las matas.
