El Bambú Flecha (Pseudosasa japonica) o bambú metake, como también se le conoce, es una especie ornamental de textura semi-lignificada y porte arbustivo, originaria de Japón y Corea. Se trata de un bambú del tipo entouceirante, que forma densos matorrales sobre un rizoma fuerte. Presenta cañas erectas a ligeramente curvadas, delgadas, cilíndricas, de color verde y con vainas persistentes.
Las cañas alcanzan alturas de 2 a 4 metros. Sus hojas son lanceoladas a lineares, acuminadas, brillantes, de color verde oscuro en la cara superior y glaucas en la inferior. Las hojas del bambú flecha son grandes en comparación con otras especies de bambú ornamentales. Rara vez florece, lo que puede ocurrir en cualquier época del año, mostrando inflorescencias del tipo panícula, compuestas por pseudoespiguillas, con flores hermafroditas y polinizadas por el viento.
En paisajismo, el bambú flecha demuestra gran versatilidad e invariablemente crea una atmósfera zen y tropical. Puede ser utilizado de forma aislada, como destacado, o en grupos, sirviendo como fondo para otras especies. También es muy interesante su uso en hileras, ya sea en forma de setos de aspecto informal o formal, a través de podas de formación.
Los setos densos de bambú flecha son excelentes para la contención del ruido y el polvo, además de formar una barrera visual perfecta, brindando privacidad a los espacios. Se adapta muy bien a macetas, pudiendo decorar tanto áreas exteriores como interiores bien iluminados. Es uno de los bambúes más resistentes a la salinidad de los vientos marítimos, siendo ideal también para zonas costeras. Solo se debe tener cuidado de contener la planta en los parterres, mediante barreras subterráneas, ya que puede volverse invasiva en determinadas situaciones.
Debe cultivarse a pleno sol o a media sombra, en cualquier tipo de suelo, pero preferiblemente fértil, drenable, enriquecido con materia orgánica e irrigado regularmente. Originario de climas templados, el bambú metake es ideal para áreas montañosas, donde otras especies de bambú, más tropicales, perecen. Con el tiempo, algunas cañas se vuelven viejas y secas, dando un aspecto un tanto descuidado al matorral. En este caso, la eliminación de estas cañas devuelve el aspecto lozano a la planta. Se multiplica por división de rizomas y matorrales.