El ajo sacha (Mansoa alliacea) es una trepadora perennifolia, de pequeño porte, de la familia de las Bignoniáceas, la misma familia de los Ipês. Presenta floración ornamental, además de interesantes cualidades condimentarias y medicinales. Originaria de la selva amazónica, todavía es poco conocida en paisajismo, siendo difundida en la India, Sudáfrica, Florida (EE. UU.), y en otras localidades de clima tropical.
Produce varios tallos desde la raíz, que se entrelazan entre sí y en el soporte, alcanzando de 2 a 3 metros de longitud. Sus hojas son lisas, opuestas, glabras, divididas en dos folíolos también opuestos, elípticos a ovados, acuminados, de color verde claro y brillantes, con venaciones bien marcadas. Al ser aplastadas o cortadas, las hojas de la planta liberan un olor a ajo.
Florece más de una vez al año, presentando inflorescencias globosas, densas, formadas por flores en forma de trompeta. Las flores inicialmente brotan en un tono profundo de lila, y gradualmente van adquiriendo tonos más claros, pasando por rosa e incluso el blanco. Esta característica hace que recuerden a las Tibochinas (Tibouchina mutabilis), ya que los tres colores pueden ser observados en la planta al mismo tiempo. La floración dura alrededor de una semana.
En contraposición a otras trepadoras de la familia de las Bignoniáceas, el ajo sacha, a pesar de ser vigoroso y rústico, presenta un crecimiento moderado, no alcanzando proporciones tan grandes como la Arbusto de Pandora (Podranea ricasoliana) o la Trompeta China (Campsis grandiflora). Así, se convierte en una especie ideal para adornar estructuras más ligeras, de menor tamaño, como celosías y arcos, y también en el coronamiento de cercas y muros. A pesar de su comportamiento trepador, el ajo sacha también puede ser conducido como arbusto, con podas de formación periódicas. Puede ser cultivado en macetas y jardineras.
Curiosidad: El ajo sacha tiene una amplia reputación como medicinal entre los pueblos indígenas de la Amazonía. Además, sus hojas son comestibles y utilizadas para condimentar diferentes preparaciones, confiriendo un sabor similar al ajo. Su aceite esencial también es aprovechado como fijador de perfumes, además de repelente de insectos y murciélagos.
Debe ser cultivada bajo sol pleno o media sombra, en suelo fértil, enriquecido con materia orgánica e irrigado regularmente. Aprecia el calor y la humedad tropicales, pero es capaz de tolerar el frío subtropical, siempre que no alcance temperaturas inferiores a 0ºC (temperatura de congelación) y esté fuera del alcance de las heladas. Las podas deben realizarse después de la floración, y es importante tener en cuenta que si la poda se realiza durante el crecimiento, la floración podría verse comprometida, ya que los brotes de flores surgen en los tallos crecidos de la última temporada.
A pesar de tolerar la media sombra, es importante que reciba luz solar directa para poder florecer. Las plantas cultivadas en lugares excesivamente sombreados pueden presentar una hermosa follaje, pero su floración será ausente o rara. Se multiplica por semillas o esquejes semi-leñosos puestos a enraizar/germinar en sustrato mantenido húmedo en verano.