¿Confundido acerca de los tipos de orquídeas?
Te entiendo…
Al principio de mi vida como jardinera, compré muchas orquídeas jóvenes (también conocidas como plántulas), de varios tipos, formas y especies, y apenas sabía cómo cuidarlas.
¡Claro! No las conocía ni entendía cómo cuidar de ellas (¡que puede ser muy diferente para cada una!). Pero simplemente estaba encantada con el maravilloso y exótico mundo de las orquídeas, y quería verlas crecer y florecer con mis cuidados, al igual que estás haciendo ahora.
Por eso, felicidades por leer este artículo. Esto demuestra que estás interesado y ampliando tus conocimientos en orquideofilia, y tengo una gran noticia para ti:
En este artículo conocerás los principales tipos de orquídeas y las diferentes formas en que podemos categorizarlas, para que nunca te sientas perdido. Descubrirás:
¿Cuántas especies de orquídeas existen y cómo diferenciarlas de otras plantas?
¡Es sorprendente! Pero estas hermosas flores, que conocemos como orquídeas, pertenecen a una familia de plantas con alrededor de 28,000 especies, distribuidas en 763 géneros. Solo en Brasil, hay aproximadamente 2,590 especies.
Así es, como lo leíste.
La familia Orchidaceae, la familia de las orquídeas, es una de las dos familias más grandes de plantas con flores, junto con la Asteraceae (la familia de las margaritas y crisantemos).
Y como si eso no fuera lo suficientemente asombroso, todavía existen numerosos híbridos (cruces naturales y artificiales), además de las variedades y cultivares. Es decir, estos números que mencioné anteriormente se refieren solo a las especies naturales, aquellas que se encuentran en la naturaleza y sin la intervención humana en sus cruces.
Además, las orquídeas se encuentran en casi todos los continentes, excepto en la Antártida, y pueden crecer en una variedad de ambientes, desde selvas tropicales hasta regiones áridas.
¿Te lo puedes imaginar?
Las posibilidades en el desarrollo de nuevas variedades son gigantescas e infinitas. Por eso, siempre aparecerán nuevas y hermosas orquídeas en el mercado para que nos quedemos maravillados.
¿Pero cómo saber si lo que tienes en casa es realmente una orquídea?
Muchas personas me preguntan si esta o aquella planta es una orquídea. Es increíble cómo las plantas pueden engañarnos. Aparece una flor más elaborada y exótica, y ya pensamos que podría ser una orquídea rara.
Pero eso no siempre es cierto.
Fuera de la familia de las orquídeas, hay muchas flores hermosas, estructuradas, con tallos largos y pétalos modificados, que se asemejan mucho a las flores de las orquídeas.
Algunas especies que nos engañan con frecuencia son los lirios y las flores murciélago. Además, otras tienen flores muy similares a las de las orquídeas, como la pata de vaca, por ejemplo. Pero una cosa es segura: ¡estas especies definitivamente no son orquídeas!
Para que una especie se clasifique como orquídea, debe tener algunas características que solo las plantas de la familia Orchidaceae poseen.
¿Quieres aprender a identificarlas?
Como las orquídeas han existido durante mucho tiempo, algunas de ellas han cambiado mucho con el tiempo, mientras que otras no tanto. Es decir, algunas han evolucionado más que otras. Además, mientras que algunas partes de una planta pueden haber evolucionado mucho, otras partes han permanecido iguales durante mucho tiempo. Y esto varía mucho de una especie a otra.
Puede parecer confuso, y lo es. Pero el punto al que quiero llegar es que, a pesar de las siguientes reglas que ayudan a definir las orquídeas, hay muchas excepciones. Es decir, si bien la mayoría de las especies tienen estas características, puede haber una o dos que no las tengan.
A continuación, algunas características que distinguen a las orquídeas de otras especies de plantas:
- Tienen una parte especial llamada «columna», que está formada por la combinación de las partes masculinas y femeninas de la flor.
- Su polen se agrupa en estructuras cartilaginosas llamadas «polinias». Estos órganos se asemejan a testículos. De ahí el nombre «orquídea», que proviene del griego y significa «se asemeja a testículo».
- Sus semillas son muy pequeñas y no contienen muchos nutrientes. Solo pueden crecer con la ayuda de algunos hongos especiales.
- Sus flores tienen una apariencia diferente, no son simétricas como un círculo, sino que tienen seis partes, tres exteriores llamadas «sépalos» y tres interiores llamadas «pétalos». Uno de los pétalos es muy diferente de los demás y se llama «labelo». Esta parte es importante para atraer a los polinizadores, como abejas, mariposas y otros, hacia la flor. El labelo es como una gran pista de aterrizaje, bien señalizada, para que los polinizadores encuentren fácilmente dónde deben aterrizar.
- Las flores de las orquídeas pueden parecer invertidas porque su ovario gira 180º mientras crece, en un proceso llamado «resupinación». Una excepción a esta regla es el género Epidendrum.
- Muchas orquídeas que crecen en árboles tienen raíces cubiertas por una especie de esponja llamada «velamen». ¡El velamen es muy importante! Permite que las orquídeas almacenen agua para «después», además de servir como refugio para los hongos que ayudan a la planta a obtener nutrientes.
¡Uf! Ahora es mucho más fácil conocer las orquídeas y distinguirlas de otros tipos de plantas.
Cómo se clasifican las orquídeas según su tipo de crecimiento
Ya sabemos que las orquídeas son flores majestuosas y fascinantes que cautivan a los amantes de la jardinería en todo el mundo. ¿Pero sabías que estas hermosas plantas pueden clasificarse según su tipo de crecimiento?
Así es, pueden dividirse en dos categorías principales de crecimiento: monopodial y simpodial.
Tipo de Orquídea Monopodial
Las orquídeas monopodiales son como plantas que tienen un tallo principal que crece hacia arriba, como una torre. A lo largo de esta torre, pero sobre todo en la parte superior, tienen hojas. Sus flores aparecen entre estas hojas. A veces, la orquídea monopodial puede ramificarse, pero esto no sucede con mucha frecuencia.
Este tipo de orquídea no puede retener mucha agua, por lo que necesita ser regada con frecuencia, evitando que el sustrato se seque demasiado. Es bastante común que tengan raíces que sobresalen del recipiente, absorbiendo la humedad del aire si el lugar es lo suficientemente húmedo.
Dividir estas orquídeas es difícil, por lo que las personas generalmente no lo intentan a menos que sean expertas. Si deseas obtener más de estas orquídeas, la mejor manera es usar pequeñas plántulas llamadas «keikis». Los keikis son plántulas que aparecen naturalmente a lo largo del tallo y los tallos florales de este tipo de orquídea. Pueden ser bastante comunes en algunas especies, pero bastante raros en otras.
Una ventaja de estas orquídeas es que puedes usar la misma maceta durante mucho tiempo, cambiando el sustrato después de un largo período. Algunos ejemplos de orquídeas monopodiales son las Orquídeas Mariposa (Phalaenopsis sp), las Vandas y la Vainilla.
Tipo de Orquídea Simpodial
Las orquídeas simpodiales son diferentes. Su tallo es de tipo rizoma, del cual surgen nuevos brotes, generalmente uno o dos por año. Este tallo crece paralelo al sustrato, es decir, puede estar bajo tierra, pero generalmente crece sobre el sustrato. Cada nuevo brote que surge del rizoma generalmente tiene una o dos hojas y justo debajo de ellas hay una parte más gruesa llamada pseudobulbo. Estos pseudobulbos almacenan agua y nutrientes para el futuro y pueden durar muchos años.
Las flores de las orquídeas simpodiales suelen surgir desde la base de las hojas, justo en la unión entre las hojas y el pseudobulbo. Después de que una flor se abre, la orquídea puede descansar y luego comenzar a crecer una nueva parte del rizoma, y el ciclo se repite. Normalmente, un pseudobulbo que ya ha florecido no volverá a florecer. Con el tiempo, pierde las hojas, se marchita y se vuelve amarillo, lo cual es perfectamente normal.
Hacer esquejes de estas orquídeas es mucho más fácil que las de crecimiento monopodial. Puedes cortar el rizoma en pedazos que tengan 3 o 4 pseudobulbos cada uno, además de un brote nuevo que esté comenzando a crecer. A veces, los pseudobulbos más antiguos pueden generar nuevos brotes.
Algunos ejemplos de orquídeas simpodiales son las Cattleyas, las Laelias y los Oncidiums.
¿Cuáles son los tipos de orquídeas según el sustrato?
Algunos grandes coleccionistas de orquídeas prefieren clasificar las orquídeas según el tipo de sustrato que utilizan para crecer. Después de todo, no todas las plantas prosperan en tierra, y las orquídeas son un hermoso ejemplo de ello.
Muchas personas pueden pensar que las orquídeas son plantas parásitas, pero esto es un grave error. La gran mayoría de las especies comerciales de orquídeas son epífitas, es decir, crecen en los troncos de los árboles sin extraer la savia del huésped. Solo necesitan un soporte para vivir en las alturas, que les ofrezca sombra fresca y algo de humedad.
Sin embargo, algunas orquídeas prefieren otros tipos de lugares para desarrollar sus raíces, como veremos a continuación:
- Saxícolas (rupícolas o litófitas): Estas orquídeas crecen en rocas, generalmente en grietas de piedras o terrenos rocosos. Para estas orquídeas, vale la pena crear un sustrato con piedra triturada, carbón, trozos de ladrillos e incluso guijarros con diferentes granulometrías. Ejemplo: Laelia lucasiana
- Humícolas: Son orquídeas que crecen en el suelo, generalmente en áreas forestales donde la hojarasca y la materia orgánica son abundantes. Estas orquídeas pueden crecer en el suelo siempre que haya hojas y ramas en descomposición con suficiente humus. Ejemplo: Chloraea alpina
- Epífitas: Las orquídeas epífitas crecen sobre otras plantas, generalmente en árboles, utilizando estos como soporte, pero sin extraer nutrientes directamente de ellos. Prefieren sustratos ligeros como corteza de pino, trozos de madera, musgo sphagnum o helecho arborescente. La ventilación alrededor de las raíces es importante para estas orquídeas. Ejemplo: Phalaenopsis.
- Terrestres: Estas orquídeas crecen en el suelo, al igual que la mayoría de las plantas, y obtienen sus nutrientes de él. Sin embargo, es recomendable hacer que el sustrato sea más ligero agregando arena y materia orgánica para que estas orquídeas crezcan bien. Ejemplo: Orquídea-bambú
- Aerícolas: Las orquídeas aerícolas a menudo crecen apoyadas en árboles y rocas en entornos saturados de humedad, absorbiendo agua y nutrientes del aire. Requieren que todo el riego y la fertilización se realice mediante pulverizaciones sobre las raíces y las hojas. No necesitan cambiar el sustrato, ya que no tienen sustrato, solo un pequeño cesto para colgarlas. Ejemplo: Vanda-teres
- Trepadoras: Algunas orquídeas son trepadoras y, a pesar de tener sus raíces en el suelo o en la hojarasca, crecen apoyándose en estructuras como cercas, celosías u otras plantas. Ejemplo: Vainilla
- Acuáticas: Estas orquídeas crecen en entornos acuáticos, en los bordes de pantanos o lagunas, con sus raíces sumergidas en el agua. Ejemplo: Habenaria repens
- Halófitas: Las orquídeas halófitas crecen en entornos salinos, como manglares o áreas de restinga cerca de la playa, donde el agua tiene una alta concentración de sal. Ejemplos: Sumaré-da-praia, Epidendro.
- Saprófitas: Estas orquídeas son peculiares porque no realizan la fotosíntesis y obtienen sus nutrientes de la materia orgánica en descomposición, como hojas en descomposición en el suelo del bosque. Suelen ser blancas, rosadas o amarillas, sin el característico pigmento verde (clorofila) que tienen la mayoría de las plantas. Ejemplo: Rhizanthella gardneri
Ten en cuenta que las orquídeas pueden mostrar más de un comportamiento de crecimiento en los sustratos. Es decir, una especie puede ser saxícola o epífita con éxito, según el entorno. Del mismo modo, el comportamiento puede ser mixto, y una misma orquídea puede ser terrestre y trepadora al mismo tiempo.
Cómo se agrupan las orquídeas según el clima
Si tienes muchas orquídeas, una buena idea es clasificarlas según el clima. De esta manera, puedes agrupar los diferentes tipos de orquídeas para tratarlas de manera similar, lo que facilita su cuidado. Además, organizar las orquídeas por tipo de clima es una estrategia inteligente cuando piensas en plantarlas en el jardín. Elegir las plantas más adecuadas para el clima de tu región aumentará tus posibilidades de éxito con estas plantas exigentes.
Aquí en Curitiba, por ejemplo, es posible plantar Cymbidium directamente en los parterres del jardín, ya que les encanta el frío que hace por aquí y florecen abundantemente.
Por lo tanto, podemos dividir las orquídeas en tres tipos según las temperaturas en las que prosperan: frías, templadas y cálidas.
1. Orquídeas de clima frío:
En este grupo se incluyen las orquídeas que aprecian un clima más frío, con temperaturas frescas pero sin experimentar fríos extremos, heladas o nieve. Suelen ser originarias de regiones templadas, subtropicales o tropicales de gran altitud, como el Himalaya o los Andes, y son adecuadas para cultivar en este tipo de clima. En verano, prefieren temperaturas entre 16°C y 21°C, y en invierno, lo ideal es que la temperatura no sea inferior a 10°C.
Las orquídeas de crecimiento frío incluyen a Cymbidium, Dendrobium, Odontoglossum y Miltoniopsis. A menudo, intentar cultivar estas especies en lugares más cálidos es posible, pero pueden no recibir el estímulo del frío y el fotoperiodo necesario para florecer.
2. Orquídeas de clima templado:
Este tipo de orquídea prefiere temperaturas agradables para los humanos, es decir, no demasiado calurosas ni demasiado frías. Prosperan en temperaturas entre 18°C y 24°C, por lo general. En invierno, no deben enfrentar heladas ni frío intenso. Lo ideal es que las temperaturas no bajen de 15ºC.
Las orquídeas que prefieren un clima templado incluyen a Cattleya, Paphiopedilum y Oncidium. Son ideales para cultivar en regiones de la Mata Atlántica.
3. Orquídeas de clima cálido:
Si el ambiente es cálido y húmedo, como en una selva ecuatorial, entonces estas orquídeas estarán encantadas. Mientras nosotros sudamos y sufrimos con los mosquitos, ellas se sienten felices con temperaturas entre 20º y 30ºC. Las hermosas Vanda y las Phalaenopsis adoran este tipo de clima. Por eso, a menudo es difícil cultivarlas en algunas localidades.
Si vives en un lugar más fresco o seco, recuerda adaptar el entorno para ellas. Crea un invernadero húmedo, utiliza humidificadores y evita el aire acondicionado frío.
Las subfamilias botánicas de las orquídeas
Si buscas una clasificación más técnica de los tipos de orquídeas, debes saber que se clasifican botánicamente en subfamilias. Después de todo, con una familia de plantas tan grande, no es difícil perderse. Al separarlas en subfamilias, podemos comprender mejor la relación entre las diferentes especies y sus características, lo que es de gran ayuda cuando estamos aprendiendo a identificar estas plantas.
1. Apostasioideae: Las Orquídeas Primitivas
Apostasioideae es la subfamilia más primitiva de las orquídeas. Estas orquídeas son conocidas por sus características ancestrales y se consideran las más cercanas a las orquídeas originales. Por lo general, tienen flores pequeñas y no tan vistosas como otras subfamilias, pero aún así tienen un atractivo único.
Estas orquídeas no tienen labelo, esa pétala especial modificada, ni polinias para recolectar el polen. Además, son terrestres, no tienen rizoma y son erectas, alcanzando hasta un metro de altura.
Este tipo de orquídeas no se encuentra naturalmente en Brasil. Son nativas del sudeste asiático y de islas cercanas, como Ceilán, Japón y el norte de Australia, donde se encuentran en ambientes sombreados y húmedos de bosques tropicales.
2. Vanilloideae: Las Orquídeas de Vainilla
Vanilloideae es una subfamilia que incluye algunas de las orquídeas más conocidas, como la orquídea de vainilla (Vanilla planifolia). Estas orquídeas son famosas por su uso en la producción de vainilla y tienen flores exuberantes y aromáticas. Se cultivan ampliamente en muchas partes del mundo debido a su valor comercial.
Las orquídeas de la subfamilia Vanilloideae pueden ser terrestres o trepadoras. Algunas de ellas no tienen clorofila. Pueden tener raíces carnosas, tuberosas como papas o incluso aéreas para ayudarlas a trepar. También pueden tener hojas carnosas, aunque en algunos casos las hojas pueden estar ausentes o modificadas. Sus flores suelen ser hermosas, con pétalos y sépalos separados. Con la excepción de algunos géneros, estas orquídeas no tienen polen agrupado en polinias reales.
Estas orquídeas se encuentran en todos los continentes, y muchas especies de ellas se pueden encontrar en Brasil.
3. Cypripedioideae: Las Orquídeas Zapato
Cypripedioideae, también conocida como la subfamilia de las orquídeas zapato, se caracteriza por sus flores peculiares, con un labelo que parece un saquito o un pequeño zapato. Estas orquídeas son amadas por su forma única y sus colores vibrantes. Son populares entre los coleccionistas de orquídeas debido a su singularidad.
Se pueden encontrar en áreas tropicales a templadas en casi todo el mundo, excepto en África y Australia. Sus representantes conocidas son las orquídeas de los géneros Paphiopedilum, Phragmipedium y Cypripedium.
4. Orchidoideae: Las Orquídeas Discretas
Orchidoideae es una subfamilia diversa y bastante numerosa de orquídeas. Son conocidas por su versatilidad y adaptabilidad a diferentes climas y entornos, pero sobre todo porque no siempre parecen orquídeas y a menudo pueden confundirse con arbustos comunes.
Estas orquídeas pueden tener tamaños y formas variados, pero por lo general tienen flores pequeñas, numerosas y de colores suaves. A pesar de que las personas no expertas pueden tener dificultades para reconocerlas, los coleccionistas las encuentran fascinantes y delicadas. La representante más conocida de este tipo de orquídea es la Ludisia, también conocida como Orquídea Joya.
5. Epidendroideae: La Mayor Subfamilia de Orquídeas
Epidendroideae es la mayor subfamilia de orquídeas y abarca una amplia gama de especies, incluyendo las especies comerciales más conocidas. Son conocidas por sus flores deslumbrantes y su capacidad para crecer en una variedad de hábitats, desde selvas tropicales hasta regiones de alta montaña.
Esta subfamilia incluye algunas de las orquídeas más espectaculares del mundo, como las Cattleyas, las Vandas, las Denphal, las Ascocendas, las Phalaenopsis, etc.
Ahora que hemos explorado las cinco principales subfamilias de las orquídeas, es evidente que estas plantas son verdaderamente extraordinarias en su diversidad y belleza. Cada subfamilia tiene sus propias características únicas, lo que las hace especiales a su manera.
Las orquídeas son un grupo fascinante de plantas que valen la pena estudiar y apreciar. Sus subfamilias ofrecen una visión detallada de cómo estas plantas han evolucionado y se han adaptado con el tiempo. Y realmente vale la pena conocer estos grandes grupos.
Los 23 tipos de orquídeas más comunes en nuestros jardines y casas
Y, por supuesto, no podrían faltar las especies de orquídeas más populares entre los entusiastas orquidófilos en este artículo. Ya sea que seas coleccionista o no, seguramente te encontrarás con estas hermosas especies cuando visites la floristería o el centro de jardinería cerca de tu casa. Vamos a conocer un poco sobre cada uno de estos tipos de orquídeas y cómo cuidar mejor de estas bellezas del reino vegetal:
1. Orquídea-bambú – Arundina graminifolia
¿Sabías que la orquídea-bambú, también conocida como Arundina, es nativa de las regiones tropicales del este y sudeste de Asia? Estas orquídeas son terrestres y tienen tallos altos, similares a bambú, con flores delicadas en la parte superior en tonos de rosa o blanco. Florecen durante los meses de verano (a veces durante todo el año en climas tropicales) y pueden alcanzar alturas impresionantes. Si buscas una orquídea imponente para tu jardín, Arundina es una excelente elección.
2. Orquídea-araña – Brassia rex
La orquídea-araña, o Brassia rex, es famosa por sus flores exóticas que se asemejan a arañas. Con pétalos largos y sépalos que se extienden como patas peludas, esta orquídea es una verdadera maravilla de la naturaleza. Las flores son de colores claros, blancas, amarillas o verdes, a menudo con manchas. Brassia rex es una orquídea de crecimiento simpodial, única e intrigante que seguramente destacará en tu colección. Les gusta los ambientes ventilados, con alta humedad y luz indirecta del sol.
3. Bulbophyllum rothschildianum
Si estás buscando una orquídea rara y deslumbrante, Bulbophyllum rothschildianum es una elección excepcional. Originaria de China, Birmania e India, esta orquídea es conocida por sus impresionantes flores que se asemejan a globos puntiagudos, agrupadas en umbelas, formando estructuras similares a paraguas. Además, sus flores emiten un aroma peculiar que atrae a los polinizadores. Tener una Bulbophyllum rothschildianum en tu orquideario es una verdadera experiencia botánica.
4. Reina de las orquídeas – Cattleya labiata
Una de las orquídeas más icónicas de Brasil. Esta especie es conocida por sus grandes y vistosas flores, y por su participación en la formación de innumerables híbridos que varían en colores, incluyendo tonos de rosa, púrpura e incluso rojo. Cattleya labiata es nativa de las regiones brasileñas y es considerada un símbolo nacional, a menudo asociada con la elegancia y la belleza. Sus flores emanan una fragancia suave y envolvente, lo que la hace aún más cautivadora para los amantes de las orquídeas.
5. Blanca de nieve – Coelogyne cristata
Coelogyne cristata es una orquídea que se destaca por la singularidad de sus flores. Originaria del Himalaya y el sudeste asiático, esta orquídea tiene flores blancas y delicadas. Son con flecos y tienen el centro amarillo dorado, creando un contraste impresionante con el exuberante verde de las hojas. Además, esta orquídea es resistente y fácil de cuidar, lo que la hace adecuada para jardineros de todos los niveles de experiencia y una de las más cultivadas en todo el mundo.
6. Cymbidium – Cymbidium sp
Las orquídeas del género Cymbidium son conocidas por sus grandes y elegantes flores. Vienen en una variedad de colores, incluyendo blanco, rosa, amarillo y verde. Al igual que Coelogyne cristata, son originarias de Asia, de la región del Himalaya. Las Cymbidium son apreciadas no solo por su belleza, sino también por su larga vida como flores cortadas. Si deseas crear arreglos florales deslumbrantes, las Cymbidium son una elección ideal. Cultívalas en sustrato pedregoso o arenoso, preferiblemente en lugares de clima subtropical a templado, ya que les gusta el frío.
7. Dendrobium – Dendrobium bigibbum
Por último, no podemos dejar de mencionar las orquídeas Denfalen, también conocidas como Dendrobios-falenópsis. Estas orquídeas son conocidas por sus flores pequeñas pero abundantes, que se asemejan a mariposas. Vienen en una variedad de colores vibrantes y son nativas de Australia y Nueva Guinea. Las Denfalen son perfectas para aquellos que buscan una orquídea de fácil cultivo, elegante y delicada.
8. Ojo de muñeca – Dendrobium nobile
Dendrobium nobile, conocido como «Ojo de Muñeca,» ¡es una de las orquídeas más populares! Pero poca gente sabe que es originaria del sudeste asiático. Sus delicadas flores son un espectáculo para la vista, con pétalos en suaves tonos de rosa y blanco. Una característica notable de esta orquídea es su capacidad para florecer incluso durante el invierno, iluminando nuestros hogares cuando más necesitamos belleza y color. Además de lucir perfecta en macetas con sustrato adecuado para epífitas, puede fijarse a los árboles del patio y adaptarse a diferentes condiciones de luminosidad.
9. Orquídea de la playa – Epidendrum fulgens
Epidendrum fulgens, cariñosamente llamada «Orquídea de la Playa,» es nativa de América Central y del Sur. Sus vibrantes flores en tonos de rojo, amarillo y naranja recuerdan el atardecer en una playa tropical. Esta orquídea es resistente y fácil de cultivar, lo que la convierte en una elección popular para jardineros de todos los niveles de experiencia. Ten en cuenta que es terrestre y prefiere un suelo arenoso, por lo que puede ser cultivada en regiones costeras, ya que tolera la salinidad.
10. Laelia purpurata
Laelia purpurata es una de las orquídeas más majestuosas y emblemáticas de Brasil. Sus grandes y exuberantes flores vienen en una variedad de colores, incluyendo morado, rosa, rojo y blanco. Esta orquídea es un verdadero tesoro nacional y es ampliamente apreciada por su belleza y elegancia. Cultívala en condiciones de luz filtrada, en un sustrato adecuado para epífitas, rico en corteza de pino, carbón, trozos de coco, grava y esfagno.
11. Orquídea-joya – Ludisia discolor
Ludisia discolor, conocida como «Orquídea Joya,» es una orquídea terrestre originaria del sudeste asiático. Lo que la hace especial son sus hojas exuberantes y patrones intrigantes que se asemejan a joyas preciosas, lo que hace que esta especie sea adecuada para el revestimiento. Aunque sus flores son pequeñas y discretas, sus hojas la convierten en una planta destacada en cualquier colección. ¡Es perfecta para terrarios, ayudando a proporcionar el contraste necesario con las plantas verdes!
12. Orquídea-coco – Maxillaria tenuifolia
Maxillaria tenuifolia, apodada «Orquídea-coco,» es una orquídea epífita con un aroma verdaderamente único. Sus flores tienen un olor que recuerda al coco, creando una experiencia sensorial única. Originaria de regiones de alta altitud de América Central y el sur de América del Norte, esta orquídea es una elección interesante para aquellos que aprecian los aromas tropicales.
13. Orquídea-amor-perfecto – Miltoniopsis
Miltoniopsis, cariñosamente llamada «Orquídea-Amor-Perfecto,» es una orquídea encantadora, con grandes flores que se asemejan a la forma de un amor-perfecto. Es nativa de América Central y tiene la reputación de no ser muy fácil de cultivar. Sus secretos: les gustan los riegos frecuentes sin encharcar y aprecian la luz filtrada. ¡Mantente atento, ya que cuando reciben la iluminación adecuada, presentan un ligero tono rosado en las hojas!
14. Lluvia de Oro – Oncidium sp
El Oncidium, conocido como «Lluvia de Oro,» es una orquídea famosa por sus flores amarillas que se asemejan a la lluvia dorada. Es nativa de América del Sur y es una elección popular para jardines y arreglos florales debido a su belleza única y duradera. Le gusta crecer bajo luz intensa y en la naturaleza, prefiere las puntas de las ramas de los árboles para sujetarse.
15. Orquídea Chocolate (Oncidium ‘Sharry Baby’)
Esta cultivar fascinante de Oncidium es notable por sus inflorescencias que desprenden un aroma similar al chocolate, de ahí su nombre popular. Las flores de Oncidium ‘Sharry Baby’ suelen ser de color marrón oscuro con manchas contrastantes y presentan una estructura distintiva con pétalos y sépalos que se asemejan a pequeñas bailarinas. Requiere condiciones de cultivo similares a otras orquídeas del género Oncidium.
16. Orquídea Zapatilla – Paphiopedilum sp
La orquídea Zapatilla, también conocida como Paphiopedilum, es una orquídea única que llama la atención por la forma de sus flores, con labios inflados que se asemejan a zapatos exóticos. Es nativa de regiones tropicales y subtropicales de Asia y presenta una variedad de colores y patrones. Las Paphiopedilum son apreciadas por su elegancia y son una adición impresionante a cualquier colección de orquídeas.
17. Capuchina – Phaius tankervilleae
La orquídea Capuchina (Phaius tankervilleae) es una planta robusta y resistente, conocida por sus inflorescencias altas y majestuosas. Sus flores tienen una forma que recuerda a un capuchón de monja, de ahí su nombre. Pueden variar en tonos desde blanco hasta rosa e incluso tonos más oscuros. Terrestre y de fácil cultivo, esta orquídea es una excelente elección para jardineros que desean una planta de bajo mantenimiento con flores impresionantes.
18. Orquídea Mariposa – Phalaenopsis sp
La orquídea Mariposa es una de las orquídeas más populares y ampliamente cultivadas en todo el mundo. Sus flores delicadas y duraderas tienen una notable semejanza con mariposas en vuelo. Están disponibles en una amplia gama de colores, desde blanco puro hasta tonos de rosa, amarillo e incluso azul (coloreado artificialmente, por supuesto). La Phalaenopsis es bastante resistente y perfecta para principiantes, siendo una adición encantadora a cualquier ambiente interior.
19. Velo de Novia – Rodriguezia venusta
La Rodriguezia venusta, conocida como Velo de Novia, es una orquídea de tamaño mediano con flores pequeñas y encantadoras. Es nativa de América del Sur y se aprecia por sus flores con flecos en densos racimos, y su fragancia suave y dulce. El Velo de Novia es una elección encantadora para quienes desean una orquídea elegante en su jardín. Le encanta crecer en árboles y no tolera las macetas. Si no le gustan las macetas, alternativamente podemos plantarla en macetas de madera tipo jaula.
20. Orquídea Uva – Spathoglottis unguiculata
La Orquídea Uva, o Spathoglottis unguiculata, es una orquídea terrestre que se destaca por sus flores en tonos de morado y lavanda. Se conoce por su resistencia y facilidad de cultivo, así como por el distintivo aroma a refresco de uva que desprenden sus flores. Esta orquídea es una excelente elección para jardineros principiantes que desean experimentar el cultivo de orquídeas terrestres. Además, sus hojas plisadas lucen hermosas en los parterres, incluso cuando las plantas no están en flor.
21. Sobralia – Sobralia macrantha
La Sobralia, o Orquídea Bambú, es una orquídea terrestre nativa de América Central y América del Sur. Una característica notable de la Sobralia es su hábito de crecimiento, con tallos erectos y hojas lanceoladas. Sus flores son igualmente impresionantes, enormes y con pétalos y sépalos lilas, y un gran labelo que puede variar de color, generalmente mostrando tonos de rosa, amarillo o naranja. Requiere luz indirecta a moderada y debe regarse regularmente para mantener el sustrato ligeramente húmedo.
22. Vanda – Vanda sp
El género Vanda incluye orquídeas de gran tamaño y aspecto majestuoso. Son conocidas por sus flores vibrantes y duraderas que surgen en tallos erectos de crecimiento monopodial. Las Vanda vienen en una variedad impresionante de colores, incluyendo azul, morado, rosa y naranja. Estas orquídeas son ideales para quienes desean un toque de elegancia tropical en su jardín. Pero ten en cuenta que aman la alta humedad del aire y sufrirán en climas secos.
23. Zygopetalum maculatum
El Zygopetalum maculatum es una orquídea fascinante con flores en forma de estrella que desprenden una fragancia única y agradable. Es nativa de América del Sur y se conoce por sus pétalos y sépalos verdes con manchas marrón-rojizas y labelo blanco marcado con rayas de color violeta. Cultivar el Zygopetalum maculatum es una experiencia verdaderamente cautivadora para cualquier amante de las orquídeas.
¡Los diferentes tipos de orquídeas son asombrosos! Cada una es más hermosa que la anterior.
¿Y ahora?
En este guía, descubrimos que las orquídeas son flores fascinantes y diversas, con una riqueza de especies que encantan a los amantes de la jardinería en todo el mundo. Desde las espectaculares Cattleyas de Brasil hasta las elegantes Phalaenopsis cultivadas en nuestros hogares, los diferentes tipos de orquídeas tienen un lugar especial en nuestros corazones y jardines.
Si te maravillaste con la diversidad de tipos de orquídeas que nuestro planeta tiene para ofrecer, no dudes en compartir este artículo con esa amiga tuya que ama las flores y los jardines. Comparte la belleza y el conocimiento sobre estas extraordinarias flores en tus redes sociales e inspira a otras personas a apreciar y cuidar estas joyas botánicas.
Juntos, podemos difundir la pasión por las orquídeas y contribuir a la conservación de estas plantas increíbles. Agradece a la naturaleza por su belleza y fragilidad, y recuerda que la preservación comienza con la conciencia. ¡Comparte este artículo ahora y únete a este movimiento!
